«Nadie se acerca a mí cuando voy a la iglesia». «Esta iglesia no se parece mucho a una familia realmente». ¿Has escuchado este tipo de comentarios? Qué triste si son ciertos, especialmente cuando la Palabra de Dios tiene tantas cosas significativas que decir acerca de cómo deberían interactuar los creyentes entre sí. Es fácil que se presenten diversos problemas interpersonales entre cónyuges, hijos, padres, hermanos, amigos y colegas, pero si eres cristiano, puedes poner el mensaje de la Biblia en práctica y ver cómo transforma radicalmente tus relaciones con los demás.
Analizando atentamente los mandatos «unos a otros» de la Escritura, los autores entregan una perspectiva bíblica del propósito de Dios para las relaciones cristianas, mostrando cómo son y cómo desarrollarlas.