Medicina de la persona es el libro clave en el que se desarrolla ampliamente el pensamiento y el método de Paul Tournier. La enfermedad física no es más que la exteriorización de una dolencia espiritual mucho más profunda. Describe el pecado, al que llama «faltas en la vida» -o sea, transgresiones a la Ley y a los mandatos de Dios-, como sustrato de la existencia, siendo la sanidad espiritual del alma algo básico y esencial para alcanzar la sanidad física del cuerpo.