La Iglesia de Jesucristo ha tenido que perseverar frente a muchos enemigos durante su historia. Pero los enemigos más peligrosos y dañinos no son los de afuera, sino los que surgen desde dentro del seno de la Iglesia.
A.B. Dayman advierte que hoy – al igual que en los primeros siglos – se levanta un enemigo de la fe – el gnosticismo o el neo-paganismo. Pero la Iglesia está dormida, y ha absorbido algunos elementos que la hará presa fácil para su enemigo.
En esta obra fascinante Dayman señala varias tendencias gnósticas que ya son aceptadas en muchas denominaciones.