Como evangélicos, deseamos ser bí queremos que nuestra doctrina tenga sus raíces en la Biblia, que nuestras vidas sean guiadas por la Biblia y que nuestros desacuerdos sean resueltos por la Biblia. Y, sin embargo, los conflictos dentro de nuestras comunidades eclesiales continúan apareciendo y aparentemente se multiplican con el tiempo. Las interpretaciones de la Biblia y las convicciones profundamente arraigadas a menudo ponen a los cristianos en desacuerdo. Animándonos hacia la gracia en el desacuerdo y la firmeza en la verdad, Rhyne Putman reflexiona sobre cómo los cristianos pueden mantener el llamado bíblico a la unidad a pesar de tener desacuerdos genuinos.